La Almu: descargando las fotos del cole de los chicos encontré en la tarjeta de la cámara estas fotitos tan resfresantes para estos días "tan cálidos". Esta es una práctica habitual, diría casi obligada, en toda barbacoa que se precie en casa de los señores del Valle. Ese agüita recién salida del pozo que pone la piel tersa y apretada para todo el año. Las fotos son del día después de la barbacoa negra. Y quiero destacar la imagen de la anfitriona y su cuñado que se resguardan del chaparrón en el remolque, disfrutando del bañito de sus invitados. Ya daban frío las gotas que me salpicaron mientras hacía las fotos, viéndolas ahora sentada en la mesa camilla, tapadita con la nagüilla y con el calentador, aún me ponen los pelos de punta.
Isabel, tras recuperar la respiración ,pone remedio a los efectos del remojón. Tengo también el video en el que se oyen sus gritos entrecortados al borde de la congelación, pero aún no se como subirlos, al parecer el formato no es compatible, intentaré remediarlo y lo cuelgo. Un besito a todos y ¡fresquito pal cuerpo!!
La Patri dice:
ResponderEliminarRecuerdo escenas similares en la barbacoa a la que yo asistí en verano. Yo misma lo experimenté. Qué fresquita el agua!! Aunque aún haga frío, pensemos que en un abrir y cerrar de ojos estamos otra vez en remojo. Besos.
Nuri: Entran escalofríos de solo pensar en un manguerazo ahora! Qué frío!
ResponderEliminarIsabel: ¡Que ganas de verano! Aunque sufra otra vez el corte de respiración. Quiero estar ya en Rota, de blanco, de negro o de amarillo si hace falta
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