El Enrique: Recordando la idea de Perico de publicar fotos con un famoso, comencé a recordar cuando yo pertenecía a ese grupo de privilegiados a los que la gente les pide autógrafos y fotografiarse a su lado. Sí fui uno de los artífices de que el Real Madrid se trajera para España su séptima copa de Europa. Cómo sudamos la camiseta ese día y cómo olía mi compi Pedja Mijatovic cuando le abracé tras marcar el gol de la victoria. Aún resuenan en mis oidos los gritos de la afición que abarrotaba el estadio Arena de Amsterdam y cómo pesaba la jodida copa, mis compañeros Morientes, Amavisca, Illgner y Fernando Hierro coreaban mi nombre mientras yo con mi brazalete de capitán levantaba la copa ante los aplausos de la afición madridista y la de la Juventus que se rindió a mis pies. Tras ese partido me replanteé la vida y la verdad es que echaba de menos nuestras noches de botellón, nuestras cogorzas de carnaval, nuestros fines de semana en la sierra, ... ese trabajo me tenía demasiado agobiado, con los Cotitos se vive mejor.
La Patri dice:
ResponderEliminarEstoy de acuerdo contigo, Enrique. La verdad es que en aquella época no había quien os aguantara: que si las fiestas en Marbella, que si los paseos en yate, que si el chalet en la Moraleja... Y Almudena sólo hacía hablar de sus nuevas amigas, las mujeres de los futbolistas del Real Madrid: que si tenían mucho glamour, que si le habían recomendado una nueva clínica de belleza, un nuevo gimnasio, un nuevo entrenador de yoga... inaguantable. Suerte que por fin os disteis cuenta de que esa vida frívola no tenía ningún sentido y regresasteis a vuestros orígenes. Sólo hay una costumbre que habéis mantenido y que no está del todo mal: las escapaditas a Ibiza de vez en cuando. Besos.
La ALmu: ssssi chica, essss asssí. uhy!! el acento madrileño que de vez en cuando me sale.Fueron años intensos, inolvidables, pero en ningún sitio del mundo encontré mejores amigos/as, creo que muchos de ellos darían todo su dinero por tener la mitad de buenos recuerdos que nosotras, aunque para ello tengan que compartir una coca-cola para cuatro o volver a pié a casa para poder tomar dos tintos de verano en vez de uno.
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